James: A pesar del tiempo de carga, es mucho más relajante. Las ayudas a la conducción contribuyen a aliviar la tensión, y la experiencia general resulta mucho más fluida. Incluso las retenciones en la autopista resultan más agradables, ya que la batería consume menos de lo que consumirías conduciendo un coche de gasolina, que estaría circulando a 2 km/h y gastando combustible innecesariamente.
Matt: La tranquilidad y la comodidad. Aunque las paradas para cargar pueden llevar más tiempo, nunca nos preocupó la autonomía. También nos aseguraron hacer pausas regulares en el viaje (como se debe hacer en cualquier vehículo), lo que nos ayudó a mantenernos alerta.
Mark: En general, las paradas para cargar se hacen cuando quieres parar igualmente, por lo que, mientras haya cargadores ultrarrápidos gratuitos para no tener que esperar demasiado, no hay ningún problema.
Maddy: Desde el punto de vista de la comodidad, siempre estuve a gusto, tanto como pasajera como conductora. Viajar como pasajera en el BMW era especialmente espacioso y agradable, y muy práctico para guardar tentempiés y estirarse. También dispone de ciertos ajustes, como el control de crucero, que hacen que parezca que el coche se conduce solo en determinados momentos, ahorrándote cansancio en los viajes largos.